Hola amig@s:
Hace unos días me invitaban a participar de esta especie de reto solidario o causa justa, como queramos llamarla y cuya finalidad es la de elaborar recetas sencillas, económicas y "resultonas" para estos días que se avecinan y para hogares donde la crisis hace estragos.
La iniciativa partió de nuestra amiga Helena del Valle, nace con el nombre de #Recetas Solidarias Para Navidad y cada día tiene más seguidores, tantos que hasta tienen un grupo y un blog propio.
Según palabras textuales que Helena deja en su blog, el objetivo sería elaborar platos con el menor coste posible y con resultados tan dignos que pueda convertirse en un plato de fiesta.
Estuve dando vueltas a la cabeza y la verdad es que tengo varias recetas en mente, pero aún sin preparar. Entonces me acordé de esta recetilla que tenia pendiente de publicar, aunque no se si cumple todas las exigencias pedidas. Yo creo que si, porque es una receta fácil, es rica, es medianamente económica y es muy resultona... para mi gusto es perfecta!!!
En casa siempre está presente en días señalados, sobre todo estos días de Navidad, porque se puede elaborar con antelación y luego sólo habría que calentar y comer... incluso si sobra, en frío y como "bocata", es ideal!!!
Es una receta que tengo en mi poder desde que tenia más o menos quince años, la aprendí de una buena amiga, una medio-madre para mí. Ella la elaboraba con falda de ternera, la parte baja de la red, la punta final de las costillas, una carne muy sabrosa y jugosa.
Yo también la elaboraba con ternera, pero ahora suelo prepararla con falda de cerdo, porque la ternera es lo único que me prohibieron desde mi "pequeño problemilla" con el cáncer. Este pequeño cambio convierte la receta en más económica para nuestros bolsillos, a la vez que es una carne muy jugosa, ideal para este tipo de recetas.
Aunque, por la cantidad de las fotos del paso a paso, pueda parecer una receta complicada, no lo es en absoluto. Simplemente quise poner todas las fotos, detallarlo todo, agilizar la elaboración y hacerla más entendible, para que los más jóvenes, aprendices o incluso estudiantes que estos días estarán fuera de casa, se animen y la puedan elaborar.
Si fuese así, si os animáis a prepararla, me daría por satisfecha. Pero si no lo es dejadla anotada para otra ocasión... porque os garantizo que os gustará!!!
Ingredientes:
- Una falda de cerdo de 1 kilo aprox. ( parte baja de la red o del cerdo, las puntas de las costillas)
- 250 / 300 gramos de carne de cerdo picada
- 1 latita de paté (a gusto de cada cuál)
- 3 huevos
- unas lonchas de jamón cocido o fiambre (sin gluten ni lactosa para intolerantes)
- 3 o 4 dientes de ajos
- 1 ramillete de perejil
- 1 cebolla grande o 2 más pequeñas
- 2 o 3 zanahorias
- 2 hojas de laurel
- 1 vasito de vino blanco
- 1 vaso de agua
- Aceite de oliva virgen extra
- Pimienta
- Nuez moscada
- Sal
- Hilo de atar (hilo tonto) y una red o malla para envolver la pieza
Elaboración:
Lo primero será pedir al carnicero que nos prepare la falda, o sea, la pieza de debajo de las costillas, las puntas.
Pediremos que la haga lo más cuadrada posible, yo cuento para ello con mi carnicero favorito, con uno de mis muchos "adoptivos", con Jorge de la carnicería Los molinos.
También el pediremos que nos dé un poco de la red o malla de envolver las piezas... seguro que lo hará, porque en los pequeños comercios hay muy "güena gente"!!!
Extendemos la pieza sobre una bandeja y untamos con una capa generosa de paté, no tiene por que ser un paté especial.
Machacamos 2 ajos y el ramillete de perejil, añadimos un poco de sal y pimienta. Mezclamos con la carne molida y la extendemos sobre el paté.
Ahora batimos los huevos y hacemos pequeñas tortillas francesas, las colocamos encima de la mezcla.
Incorporamos el jamón cocido y envolvemos la carne hasta formar un rulo. Salpimentamos un poco.
Atamos la pieza con hilo de atar, lo que por aquí se le conoce como "hilo tonto", luego la metemos en la malla o red y la ponemos en una bandeja de horno.
Pelamos las cebolla, los ajos restantes y las zanahorias. Los incorporamos a la bandeja.
Añadimos el vaso de agua, el vasito de vino, un chorrito de buen aceite virgen extra, el laurel y un poco de nuez moscada recién molida.
Llevamos al horno previamente calentado a 160º, no conviene que se dore muy pronto, es preferible hacer a fuego más suave.
Tapamos con papel de aluminio, para evitar que se reseque.
A media cocción daremos la vuelta a la pieza y añadiremos un poco más de agua si fuese necesario.
El tiempo variará según las prestaciones del horno, pero al estar a temperatura media será un poco más largo, aproximadamente unos 40 m. Pero esto dependerá siempre de las prestaciones de horno como ya digo.
Sabremos que está listo por el color y el aroma que desprende, aparte de que podemos pinchar con un palillo en el centro, si vemos que no sale nada de jugo o sangre estará en su punto.
Dejamos enfriar, cortamos la malla y los hilos y hacemos rodajas.
Con el resultante de la cocción de las verduras haremos una rica salsa pasándola por la batidora, rectificamos de sal si hiciese falta. Servimos acompañada de unas ricas patatas fritas!!!
Si queremos agilizar el tiempo de cocinado, podemos ponerlo un rato en la olla a presión y luego terminar la cocción en el horno... pero eso lo dejo a vuestra elección!!!
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