Las alitas de pollo son una parte que no suelen cocinarse mucho en solitario, pero que poseen un buen sabor y podemos sacarle mucho rendimiento. Además, si las trabajamos bien, obtenemos una pieza muy jugosa. Normalmente las alitas que más solemos ver son las que se cocinan al horno o las fritas. La receta que he elaborado es un poco diferente ya que lo que he hecho es separarlas y he bajado la carne para que sea más fácil el comerlas. Casi con un mordisco podríamos tomarlas. Además, con esta técnica, al separar los tendones hacemos que la carne sea más tierna.
En la receta de hoy, las he querido preparar con una salsa que llevo zumo de granada y unos níscalos. Como veréis se trata de una receta muy fácil, muy sana y muy económica. ¿Porqué digo esto? Porque me gustaría que conocierais la campaña que hace unas semanas inició Helena del Valle, las #RecetasSolidariasParaNavidad. En ella se pretende elaborar platos con ingredientes que estén al alcance de todos los hogares, que llenen una mesa de Navidad y que sean sabrosas. Este tipo de iniciativas deberían ser más habituales y no solo en época navideña, al menos esa es mi opinión.
Os dejo con los ingredientes y su elaboración.
Ingredientes:
8 alitas de pollo
Salsa de soja
Tomillo y romero
Pimienta negra molida
Moscatel
Zumo de 2 granadas
400 gr. de níscalos
Aceite de oliva
Sal
Para el fondo:
Recortes de las alitas
2 zanahorias
1 cebolla mediana
1 trozo de puerro
1 trozo de nabo
En primer lugar lo que haremos es retirar la carne de las alitas como en la foto. Las maceramos con la salsa de soja, el moscatel, la pimienta negra y las hierbas aromáticas.
En primer lugar elaboramos el fondo de ave.
Ponemos a dorar con un poco de aceite de oliva los recortes de las alitas y cuando estén bien dorados añadimos las verduras troceadas. Las rehogamos unos minutos y añadimos un poco de moscatel. Dejamos reducir y vertemos agua. Cocinamos unos 60 minutos aproximadamente.
Seleccionamos unos buenos níscalos y los cortamos en trozos pequeños.
Exprimimos las granadas de dos granadas.
Marcamos las alitas con un poco de aceite de oliva y reservamos.
Seguidamente sofreímos las setas. Añadimos la maceración de las setas y a continuación vertemos el zumo de las granadas. Agregamos las alitas y las cubrimos con el fondo de ave. Rectificamos de sal y cocinamos a fuego moderado fuerte, 30 minutos aproximadamente. Una vez finalizado el tiempo, dejamos reducir la salsa hasta que comience a espesar. Ya las tenemos listas para comer.
Ponemos en el fondo las setas con la salsa y encima las alitas que deseemos. Espero que la receta sea de vuestro agrado. Bon profit!
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